Para muchas
de nuestras abuelas amasar el pan y otro tipo de masas era cosa de todos los
días, una actividad integrada naturalmente a sus vidas cotidianas.
Pero esa
costumbre se ha ido perdiendo a lo largo de los años, por muchas razones. Una
de ellas -la principal- tiene que ver con la falta de tiempo (amasar pan supone
dedicarle una generosa cantidad de tiempo). Otra, con la disponibilidad de
panes y productos de todo tipo, tamaño, sabor y color en supermercados,
panaderías, dietéticas, etc.
Al mismo tiempo, hay una creciente tendencia a rescatar ciertas tradiciones culinarias que tienen que ver con la cocina casera en su aspecto más simple y original. Y los panificados son uno de sus representantes más genuinos.
Al mismo tiempo, hay una creciente tendencia a rescatar ciertas tradiciones culinarias que tienen que ver con la cocina casera en su aspecto más simple y original. Y los panificados son uno de sus representantes más genuinos.
Nosotros nos proponemos amasar y hacer del pan de cada día una deliciosa actividad.
JORGE MOSTRANDO LA PRODUCCION DE PIZETAS DEL TALLER |
GABRIELA AMASANDO BIZCOCHOS DE GRASA |
ESTEFANIA, JORGE Y DOMINGO AMASANDO! |